Besos traidores.

capitulo 3.

-Jassiel.

Si hoy era el día en  que tenía que morir  no me importaba después de besar sus labios todo se sentía bien, eran los más suaves que había besado y aun no logro descifrar si sus besos eran adictivos por su suavidad o por el hecho de que una parte de ella no sabía cómo hacerlo, supongo que los nervios de besar a un hombre como yo es lo que provoca.

Pero una parte de mi después de dejarla ir con el imbécil de Alexander se siente frustrada – aún no sé por qué mierda la deje ir con ese imbécil que no dejaba de verla como si ella fuera una estrella fugaz, dios me dan ganas de matarlo siempre que veo como la abraza, pero son más grandes mis ganas de matarme por no ser lo suficiente hombre para tenerla conmigo, solo para mí; me siento frustrada por no tenerla, por estar lejos de ella, porque después de dejarla ir corrí a los brazos de  Giselle.

Pero es que simplemente la primera vez que vi a Alemania  fue como ver una ave,  como una carraca lila, pequeña , llena de vida, gloriosa, y que vivía en su mundo o al menos eso era lo que sus ojos me dejaban ver justo como los de esa ave , y la primera vez que hablamos fui lo suficientemente idiota para crear una grieta entre nosotros y  era como si cada vez que estábamos juntos mi boca estuviera controlada para alejarla de mí, por eso odiaba verla feliz con Alexander, no sé si sentía amor en un principio pero el día que bese sus labios, era como probar un chocolate, rico, suave, que encaja contigo, y siempre te deja con ganas de mas, así era ella una persona especial con quien querías estar todo el día, con quien los minutos pasaban demasiado rápido porque era divertida, era simplemente hermosa.

Y después de esa noche todo en mi cambio, pero yo no me quise dar cuenta continúe mi relación con Giselle  e inicie una con Alemania.

-Alemania.

Después de ese beso no sé si he muerto o dios ha sido lo suficientemente misericordioso para dejarme vivir, no sabía bien cómo hacerlo pero cuando termino, continuamos bailando  por mucho tiempo más, hasta que llegó el momento en el que me tenía que ir y bueno yo había llegado con Alexander y no me iba a ir con jassiel solo porque el tipo besara malditamente bien.

Así pasaron los días y debes en cuando nos veíamos en la universidad aunque cada vez que lo hacíamos yo no sabía bien que hacer, no sabía si ese beso para el significaba algo o solo lo había hecho porque tenía unos tragos de mas encima, hasta que un día literalmente me rapto y no entramos al resto de nuestras clases, me llevo a su departamento ahí me conto que tenía novia,  mi corazón se partió en mil pedazos. Dios quería matarlo porque me había besado, porque me seguía ilusionando y porque a pesar de todo, sus ojos reflejaban una tristeza. Fue entonces cuando decidí marcharme.

-Por favor no te vayas- dijo desesperado.

Por favor déjame ir tengo cosa que hacer- le conteste sin reflejar el dolor que sentía.

No lo hagas por favor, quiero que hablemos de nosotros de lo que tenemos – lo dijo con un tono suplicante.

¿Nosotros?, ¡no hay un nosotros! Tú tienes una relación con otra persona –le conteste dejando que el 

dolor que sentía se reflejara en mi voz, fue entonces cuando me beso.

Está bien hablemos, pero por favor no vuelvas a besarme- le conteste.

¿Tan mal beso?- lo dijo con una sonrisa arrogante.

mmmm si- le conteste más por diversión que por decirle la verdad.

¡Ok! Y sin más se sentó sobre el sofá que tenía detrás arrastrándome a sentarme sobre sus piernas.

Yo sé que esto es lo que todos dicen pero te prometo que yo no seré igual voy a dejar a Giselle hace un tiempo no nos llevamos bien y aunque te suene extraño y creas que no nos conocemos lo suficiente quiero estar contigo. – lo dijo con la sinceridad que se requiere en momentos como ese justo para creerlo.

¿Pero por qué no se llevan bien?- la curiosa que hay en mi salió una vez más.

Por un momento vi dolor en sus ojos y aunque tal vez solo pasaran unos segundos en lo que contesto a mí me pareció una eternidad- porque hace un tiempo ella me fue infiel así que terminamos pero hace no mucho ella me pidió que regresáramos  y sé que suena estúpido y no por eso te quiero culpar pero en una ocasión no sé si fue despecho o que rayo te vi abrazando a Alex mientras me veías con ojos soñadores recuerdo que iba con ella y cuando pasamos a su lado tú le diste un beso en la mejilla a Alex y eso me molesto tanto que una parte de mi quería herirte y regrese con ella justo cuando los perdí de vista.

No sabía si sentirme enojada, emocionada o simplemente sentir tristeza por la confesión que él había hecho.

¡Así que soy la culpable!-  le conteste con un tono de divertido, enredando mis dedos en su pelo mientras besaba sus labios y con eso aceptando un nosotros.

Si entre las manos juntas

Pudiera ver los rasgos de tu destino

Todas las palabras y sentimientos

Ahora se pierden en la luz

Pero seguramente algunas de ellas

Llegaran a ti que estas distante.

-clanad